Fue inventado en Japón por Daikin en 1982, quien lo patentó como VRV. Posteriormente, el resto de la industria adoptó la denominación genérica «VRF», siendo que lo que varía es realmente el flujo del gas refrigerante, en función de las necesidades de las unidades remotas.
Los sistemas VRF (del inglés Variable Refrigerant Flow), son sistemas de climatización de gran eficiencia, idóneos para la climatización de edificios y grandes locales comerciales. Ya que permiten regular el flujo de refrigerante que se envía desde una misma unidad exterior (condensadora) a distintas unidades interiores (evaporadores) utilizando la tecnología Inverter en compresores y válvulas de expansión electrónicas.
Tienen capacidad para climatizar hasta un edificio completo, gracias a la posibilidad de conectar múltiples unidades interiores de diferentes tipos con una gran flexibilidad y regulación independiente.
Esta tecnología no solo adapta el consumo energético a la demanda, sino que además, es capaz de variar la cantidad de refrigerante que se envía a las unidades interiores en función de la regulación de temperatura de cada una de ellas. Incluso es capaz de mantener unas encendidas y otras apagadas, gracias a su sistema de control electrónico. Además de todo, las unidades exteriores son muy silenciosas.